Hace cerca de un año cumplimos uno de nuestros sueños, traer a pinchar a Andrew Weatherall, todo un mito de la música electrónica. Fue un gran placer sobre todo porque detrás del mito había una persona encantadora, algo que desgraciadamente no suele ocurrir a menudo entre las estrellas del techno. La cuestión es que compartir esos momentos con un mito de su envergadura es la ocasión perfecta para preguntarle sobre música, clubes, etc. Así que recuerdo que le preguntamos sobre cual era su club favorito del mundo y nos respondió sin dudarlo, el Robert Johnson. No es casualidad, son muchos, entre ellos Ewan Pearson que también nos lo confesó entre bambalinas hace un par de años, los que coinciden en señalar a este club regentado por el gran Ata (soñamos también con traerlo pronto) y Sebastian Kahrs en la ciudad de Offenbach (a las afueras de Frankfurt).
Este año el Robert Johnson cumple 13 años y lo celebrará con una suculenta gira por todo el mundo y la publicación de un libro titulado Come On In My Kitchen. El libro cuenta con 400 páginas que combinan fotografías, entrevistas y pequeños ensayos en los que intervienen grandes nombres de la electrónica como Ewan Pearson, Roman Flügel, Theo Parrish, DJ Harvey o Bill Brewster, coautor del libro Last Night a DJ Saved My Life.
Atanasios Christos Macias, Ata, creó el club Robert Jonhson en 1999 una vez que la escena de Frankfurt había caído en desgracia con el cierre de los míticos Omen y Dorian Gray, palacios del techno alemán de los 90. El creador de la tienda Delirium y los seminales sellos Ongaku, Klang Elektronik y Playhouse, tenía en mente crear un club a su medida, pequeño, simple y sin decoración alguna, con un sound system extraordinario y dedicado por completo a la música house con alma. El resultado ha sido un club ya legendario donde la música es lo más importante y donde un excepcional lineup internacional disfruta semana tras semana de la libertad más absoluta para pinchar lo que buenamente quieran. Por este motivo es uno de los clubs preferidos por la mayoría de discjockeys (que aman realmente la música).
Parte del miticismo que rodea al club se lo han labrado precisamente ellos mismos por esa parquedad tan alemana y esa búsqueda de la pureza que hace que, por ejemplo, no impriman flyers ni anuncien su lineup (ni siquiera en su web que es tan minimalista como el club mismo), o que tengan una dura política de entrada gestionada solo por chicas que forman todo el staff. Además, el mismo Ata, gran aficionado a la gastronomía utiliza su club para ofrecer unos peculiares eventos musico-culinarios todos los jueves como Club Michel. Además del propio Ata han cocinado en este peculiar club el mismísimo Laurent Garnier o Charlotte Mies, la chef oficial de los chicos de Kompakt. En la gira de promoción también tiene previsto el amigo Ata ofrecer estas cenas íntimas previas al bolo en cuestión.
Para celebrar estos 13 años de hermanamiento con la música el club el Robert Johnson ha preparado una gira por sus clubs preferidos de Europa. La única pega de momento es que parece que no pasarán por nuestro país, así que si queremos vivir la experiencia Robert Johson tendremos que ir mirando billetes o mejor aún vivirla in situ en el mismo club. Estas son las fechas:
















